¿Sabes por qué resulta tan importante que el aceite de oliva llegue fresco a tu cocina?
Conservar como el primer día las propiedades organolépticas del AOVE está sujeto, no solo a cómo lo conservemos, sino a cómo llega a nuestra cocina. Pero…¿qué procesos debe pasar el zumo de aceituna para estar como el primer día? ¡Presta atención!
Que las propiedades organolépticas de los zumos naturales son frágiles porque se pierden rápidamente es algo que todos sabemos. Pero, mientras que el zumo de naranja recién exprimido debe consumirse de inmediato, el AOVE tiene una características muy especiales…
¿Por qué se conserva tan bien el Aceite de oliva virgen extra de Familia Santías?
El aceite de oliva es de los zumos más puros que podemos adquirir. Sin conservantes ni colorantes. Y lo mejor de todo: puede durar más de un año en tu despensa. Pero, ¡mucho ojo! Como ocurre con todos los alimentos, debe cumplir unos requisitos mínimos de conservación. Guardarlo en un lugar fresco y seco o que no le de la luz del sol son algunos de ellos, que te explicaremos más adelante.
¿Qué otros factores ayudan a la conservación?
Cuidar los procesos de producción es fundamental para que el aceite de oliva se mantenga fresco en la despensa de tu cocina. Por ello, en Familia Santías cuidamos todas las fases de producción de este producto tan nuestro, prestando especial atención a los tiempos de recogida y elaboración.
Pero, ¿qué debe tener un buen AOVE para que su conservación se mantenga en estado óptimo mucho más tiempo?
En esta fase, Familia Santías utiliza dos tipos de vibradoras: una, autopropulsada por gasolina; la otra, electro-portátil, que apura los árboles y los frutos para que no se produzca ningún daño durante la caída y recogida del fruto.
Por otro lado, los tiempos de recolección son mucho más cortos, por lo que la calidad del fruto es más homogénea y de mejor calidad. En definitiva, se conservan todas sus propiedades como el primer día durante más de un año.
¿Qué le sucede al aceite de oliva virgen extra cuando transcurre un año?
El AOVE se puede consumir perfectamente hasta un año después de adquirirlo, pero también es cierto que las propiedades organolépticas del zumo de oliva, incluyendo ese color iridiscente tan característico y ese delicioso aroma, acaban perdiéndose.
El aceite de oliva es un tesoro. ¡Consérvalo como se merece! Se trata de un zumo natural y, lógicamente, con el tiempo pierde propiedades. Pero a diferencia de otros zumos, ¡no caduda! Gracias a esta particularidad, puedes adquirir grandes cantidades sin miedo a que el oro líquido se eche a perder. ¡Eso sí! Deberás tener en cuenta unas normas básicas de conservación:
Evita la luz directa y, si el envase es oscuro, ¡mucho mejor!
Cuidado con las altas temperaturas. Deterioran su textura y la hacen más ligera. La temperatura debe ser constante y rondar los 20 ºC. Por encima de los 22 ºC, el aceite de oliva comienza a oxidarse.
Cierra el envase herméticamente tras cada uso para no dejar entrar el oxígeno: corres el riesgo de que acabe rancio.
¿Cómo garantiza Familia Santías la frescura de su aceite de oliva virgen extra?
Desde Santías, mimamos todos los procesos de elaboración del preciado oro líquido. Además, para garantizar una mayor calidad al mejor precio, seleccionamos minuciosamente nuestras olivas, a las que sometemos a una molturación diaria a baja temperatura. Finalmente, vendemos el producto directamente a los clientes desde nuestra fábrica.
Con ello conseguimos evitar, por un lado, que el producto permanezca esperando en los supermercados, perdiendo parte de su frescura. Por otro, evitamos intermediarios, garantizando un precio justo a una calidad inigualable.
Nuestros tiempos de recolección son mucho más cortos, por lo que, desde que la oliva cae hasta que llega a tu cocina, pasa poco tiempo.
El embotellamiento se realiza bajo pedido, llegando a tu cocina recién elaborado. ¡Del olivo a tu mesa!
¿Quieres comprobar tú mismo la frescura del AOVE? Conoce nuestros aceites
