Aunque en el mercado lo que se suele hacer es elegir y cultivar una única variedad, en Familia Santías hemos seleccionado dos tipos de oliva para elaborar aceites únicos. ¿Quieres saber cuáles son las variedades de aceituna que elegimos, por qué y cuáles son las características de cada una de ellas? ¿Quieres descubrir en qué se diferencia nuestro aceite de oliva? Hoy vamos a sumergirte en la historia y tradición de la Familia Santías. ¿Nos acompañas?
La dedicación y el amor por el aceite de oliva es una tradición que se ha transmitido de generación en generación en la Familia Santías. Nuestro abuelo creó una cooperativa en Baeza, una empresa familiar que continuó nuestro padre y ha llegado hasta día de hoy. Hasta nosotros.
Si algo caracteriza y diferencia nuestro aceite de oliva es, por un lado, la tradición e historia y, por el otro, la venta directa al consumidor. Precisamente, en este segundo aspecto es donde nos centraremos y donde se encuentra la respuesta a la pregunta de este post.
¿Qué diferencia al aceite de Familia Santías?
La comercialización del aceite de oliva de Familia Santías se centra en la venta directa al consumidor que garantizan un precio justo y la máxima calidad del oro líquido.
Por un lado porque, al eliminar intermediarios y evitar el sobrecoste, se entrega al consumidor final un aceite de gran calidad a un precio justo. Además, no se almacena por lo que no se alteran o disminuyen sus características y propiedades, haciendo posible que el oro líquido llegue a la cocina de los consumidores directamente del campo.
¿Por qué ambas variedades de aceituna?
El consumidor es la clave. Saber escuchar y dar respuesta a sus necesidades es, por tanto, primordial. Por eso, en Familia Santías hemos escuchado a nuestros clientes y sus peticiones de unir las dos variedades de aceituna: arbequina y picual. Por eso, se lo hemos adaptado a la demanda. Literalmente.
Familia Santías cultiva, en sus tierras de Úbeda y Baeza, las dos variedades de olivo: picual y arbequina.
La aceituna picual es de tamaño medio o grande (con un peso medio de 3,2 gramos) que proporciona un alto rendimiento en la producción de AOVE alcanzando el 27 % de su peso. De ella se obtiene un aceite de oliva con una alta proporción de ácido oleico (78 %) que destaca por su amargor y picor con aromas afrutados a tomate, higuera y hierba. Es uno de los AOVE más estables y resistentes a la oxidación.
La arbequina es una aceituna pequeña y se usa para producir un aceite de gran calidad, más mantecoso, dulce (es decir, sin regusto amargo) y con un toque ligeramente picante en la garganta (que indica que es fresco). Este AOVE suele ser muy aromático presentando olores frutados de plátano y manzana.
El picual aporta estabilidad y fuerza mientras que el segundo, dulzor y suaviza la potencia del picual. Y ambos, ofrecen un aceite de gran calidad de esos que se convierten imprescindibles después de probarlos.
¿Y tú, a qué esperas para descubrir, por ti mismo, qué hace al aceite de Familia Santías único e inolvidable?
Puedes comprar aceite de oliva picual o arbequina o una mezcla perfecta de ambas variedades en Nuestra Tienda.